Muchas mujeres sufren dolorosas molestias justo antes de la regla o durante ésta, es los que conocemos como ‘síndrome premenstrual’. Para aliviar estos síntomas, contamos con las virtudes medicinales de una excelente planta: la onagra.
Un poco de historia…
El nombre botánico de la onagra (Oenothera), procede del griego ‘oinos’ (vino) y ‘ther’ (animal salvaje), haciendo alusión a la antigua creencia, que aseguraba que esta planta era capaz de amansar a las fieras si se les daba a beber sus flores maceradas en vino.
Es una planta originaria de Norteamérica, donde los curanderos indios la empleaban en forma de cataplasmas para aliviar las heridas, curar los abscesos y calmar la tos, además de alimentarse con sus raíces.
Los cazadores daban otro curioso uso a la onagra, que consistía en frotarse los zapatos con sus flores y hojas, para camuflar su propio olor y así poder acercarse más a los animales.
La mayoría de las especies de onagra llegaron a Europa como ‘polizones’ en los barcos cargueros que transportaban algodón. Se utilizaba la tierra americana para rellenar el fondo de los barcos, y en esa tierra, que después se vaciaba en las cercanías de los puertos, iban las semillas de la planta.
Pero no sólo se emplean sus raíces, flores y hojas en terapéutica; a partir de sus semillas, por presión en frío, se extrae un aceite rico en ácidos grasos esenciales, especialmente en ácido gamma-linolénico (GLA), importante miembro de la familia de los ácidos grasos omega-6.